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Al surgir sobre tu cielo con desesperación me aferro a tu
cuerpo.
¡Este que aun muestras al desnudo y que ansioso se
encuentra por ser una vez amado por mi intenso halo!
Milenio tras milenio padezco un voraz apetito debido a
falta de tu sentimiento. ¡Y después de mil vidas e infinidad de reencarnaciones
a tus sueños aun protejo!
Sobre tus sueños, sobre los océanos; dentro de los
extensos desiertos yo me deleito con tu reflejo. Aún no sean las mismas
facciones, la misma carne; los mismos huesos me apasiona ver que con ternura aun
suspiraras sobre nuestro firmamento.
Las fases de mi cuerpo sincronizan con tu sentimiento.
Este que de momentos duerme al desamparo por mi
alejamiento,
mientras con tu carne se alimentan infinidad de entes
rapaces que presurosos desgarran y con lentitud se alejan degustando de su
presa predilecta. ¡Soberbios engullendo trozos de carne donde antaño tu libido
y mi luz serena engendraron infinidad de estrellas!
Impregnado de celos impotente me muestro.
Es ahí donde a mi sentimiento tus pensamientos lo alientan.
Pese a que de momentos no sea visible dentro de tu cielo.
¡Siempre encarnare en tu vista como tal luna sangrienta!
En cuarto menguante o cuarto creciente mi lado sensual
surge incitando a todos aquellos poetas a que me tomen como la musa que les
inspira a crear bellos poemas, pero mi cósmico libido procura únicamente a mi
único ser. ¡Ese que paciente me observa, qué paciente me espera aun su
felicidad sea momentánea y no eterna!
Para otros tantos amantes soy la diosa que en luna llena
luce sangrienta.
Ellos esperan que mi lado oscuro libere a sus bestias
internas.
Mi mítico ser se debate en contra del dominio de mis
distintas fases lunares.
¡Es que no deseo que nuestro encuentro se torne eterno!
Ni que tu sufrimiento sea momentáneo dentro de nuestro
vasto universo.
¡Anhelo que en las noches subsecuentes tus suspiros se
muestren y me confirmen que la vida aun te pertenece!
Pese a que mi cuerpo se encuentra custodiado por la
tierra y el sol.
Mi amor por mi pequeño mortal crece y desborda en cada
una de sus vidas.
Eclipsando a tu sentimiento noche tras noche yo me encuentro.
Y no desistiré hasta hacer míos a todos tus pensamientos,
no importando que la gravedad juegue con mi cuerpo haciendo que sentimientos
ajenos me golpeen pulverizando parte de mi ser e impregnándome con deseos
perversos.
En cada despertar brillo con temor de que la creación
decida empatar a tu corazón a otro sentimiento y con resignación mi brillo
tenga que iluminarte en los momentos en que labios ajenos te provean de mutuos
besos.
Ni la vida ni la muerte.
Ni el paraíso o el mismo infierno podrán separarme de tu
alma.
¡Ni jamás mi intensidad dejará de iluminarte pese a que
el tiempo renazca!
¡Ni tampoco que yo, la luna de tu cielo me extinga sin
saber cuánto es lo que tu sentimiento en cada uno de nuestros eclipses ha
procreado dentro de mi desértico cuerpo!
©Reservados
“Eclipsando
a tu Sentimiento”
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¿Y a tí, en estos momentos en que te han transformado tus sentimientos?🤍🖤